Excursión Privada a Colonia: Historia y Encanto Alemán en un Día
Desde Ámsterdam, partiremos hacia Colonia, una de las ciudades más vibrantes y antiguas de Alemania. Fundada por los romanos y con más de 2.000 años de historia, esta ciudad combina su pasado medieval con un ambiente moderno y dinámico.
Al llegar, nos dirigiremos directamente al corazón de Colonia para visitar su joya más emblemática: la Catedral de Colonia (Kölner Dom), una de las iglesias góticas más impresionantes del mundo y declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Su imponente estructura y sus intrincados vitrales nos transportarán a otra época. Para quienes se animen, subir a su torre es una experiencia inolvidable, con vistas panorámicas de la ciudad y el río Rin.
A continuación, pasearemos por el casco antiguo, donde descubriremos encantadoras plazas como la Alter Markt y Heumarkt, repletas de historia, cafés y cervecerías tradicionales. También conoceremos el Ayuntamiento de Colonia, uno de los más antiguos de Alemania, y exploraremos las coloridas casas junto al Rin, que ofrecen una estampa pintoresca de la ciudad.

Colonia es famosa por su cerveza Kölsch, y qué mejor manera de conocer su cultura que almorzando en una auténtica cervecería tradicional. Se recomienda probar platos típicos alemanes como el Himmel und Ääd (puré de patata con manzana y morcilla) o el Sauerbraten (carne asada marinada).
Después del almuerzo, recorreremos el moderno Rheinauhafen, un puerto renovado con arquitectura contemporánea y vistas espectaculares del Rin. También tendremos tiempo para visitar el Museo del Chocolate, donde se puede aprender sobre la historia del cacao y, por supuesto, degustar algunas delicias.
Antes de regresar a Ámsterdam, dispondremos de tiempo libre para explorar a nuestro ritmo, ya sea paseando por sus calles comerciales, visitando alguna de sus numerosas iglesias románicas o simplemente disfrutando del ambiente de esta ciudad alemana.
Tras un día lleno de historia, cultura y gastronomía, emprenderemos el viaje de regreso con la satisfacción de haber descubierto una de las ciudades más fascinantes de Alemania.